LA ÚLTIMA SEMANA DE CLASES: importancia de un buen cierre escolar
- Pizzini Argentina
- hace 1 día
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Cierre escolar.
El final del año escolar representa una etapa crucial en la experiencia educativa. Sin embargo, no todas las instituciones lo gestionan con la misma intención. Mientras algunas escuelas organizan una programación estructurada en la que cada docente realiza un cierre significativo con sus alumnos, otras presentan actividades sueltas que no cubren el horario completo, generando desorganización y desmotivación en los estudiantes.

Cuando se pierde el propósito
En muchas escuelas, la última semana de clases termina convirtiéndose en un tiempo muerto: estudiantes sin rumbo fijo, clases vacías, pasillos llenos de niños sin nada que hacer, y la percepción generalizada de que “ya no hay nada importante”. Este escenario, lejos de ser inofensivo, envía un mensaje confuso: que el cierre del ciclo no merece atención, ni reflexión, ni planificación.
El resultado es una desconexión emocional con el proceso educativo. Para los estudiantes, especialmente los más jóvenes, asistir a clases sin propósito puede traducirse en aburrimiento, pérdida de interés y una sensación de inutilidad. Para los docentes, puede ser una oportunidad desaprovechada para reforzar vínculos, hacer balances, o motivar para el próximo año.











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